Las ojeras son uno de los males más corrientes que padecen muchas personas hoy en día. El motivo de las mismas, puede venir derivado por varios motivos diferentes. En este sentido, podemos encontrarnos con ojeras por no haber descansado bien y tener cansancio o podemos tener ojeras simplemente como síntoma de la edad.
Independientemente del motivo por el que sean estas ojeras, afean el rostro y es por ello que cada vez más personas tratan de buscar soluciones para poner fin a ellas.
Afortunadamente para acabar con estas ojeras, existen varios tratamientos de cirugía estética que vamos a comentar a continuación. Estas ojeras, además de ofrecer una peor imagen de nosotros mismos, termina por añadirnos más años encima de los que realmente tenemos, por lo que nos hacen parecer mayores. Estas ojeras son bastante antiestéticas y es obvio que tienen una gran importancia dentro del rostro. La mirada, que muchas veces se dice que es el espejo del alma, queda bastante afeada debido a estas ojeras y además parecerá mucho más triste.
Las ojeras se caracterizan por tener un color azulado y es importante saber, que no se trata de algo parecido a una mancha que aparece en la piel, si no que lo que indica, es una falta de irrigación de los tejidos producida por cualquiera de los aspectos anteriormente mencionados. Ahora que tenemos algo más claro lo que son las ojeras, vamos a hablar de las operaciones y remedios que podemos llevar a cabo para liberarnos de las mismas.
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Mesoterapia virtual
A veces tenemos que saber detectar cuando nuestro rostro está pidiendo un descanso. El resto del cuerpo es mucho más sencillo debido a que el síntoma de cansancio es un buen indicador para mostrarnos que es un buen momento para parar. Sin embargo, con el rostro no sucede lo mismo y es precisamente con la aparición de estas ojeras cuando nos damos cuenta de que realmente necesitamos dar un descanso a nuestro rostro y llevar a cabo las medidas necesarias para reactivar esa circulación en los tejidos.
La mesoterapia virtual nos ayuda a obtener ese merecido descanso. Estamos ante un tratamiento que no es para nada invasivo y que además, no precisa de tiempo de recuperación por lo que una vez finalizada la sesión, te puedes reincorporar a tu vida cotidiana sin ningún tipo de problema. El funcionamiento del mismo es bastante sencillo y para llevarlo a cabo, lo que se hace es mediante una técnica de electroporación, dilatar el poro de la piel en donde se va a introducir el ácido hialurónico. Mediante la introducción de este ácido hialurónico, lo que pretendemos es conseguir una mayor hidratación y elasticidad, por lo que conseguiremos un aspecto más regenerado y estaremos preparados para aguantar el día a día.
El ácido hialurónico es un principio activo que el cuerpo genera de forma natural, por lo que no estamos ante ningún complejo extraño. En este sentido, mediante su introducción lo que se trata de favorecer es la activación de esos estímulos dado que por causas naturales, le cuesta un poco más producirlo. Esta complicación a la hora de producirlo, se agrava bastante más con el paso de los años. Por este motivo, las ojeras son mucho más frecuentes en edades avanzadas.
Las sesiones del tratamiento tienen una duración media en torno a unos 30 minutos y los efectos de la misma, son inmediatos, por lo que te podrás despedir de las ojeras una vez salgas de la clínica. Como la mayoría de tratamientos de cirugía estética, es recomendable que durante unos días después del tratamiento, protejamos a la zona tratada del sol. Para ello, simplemente bastará con utilizar protector solar, además de beber agua en abundancia para estar hidratado.
Más información sobre la mesoterapia y sobre el ácido hialurónico.
Radiofrecuencia facial
La radiofrecuencia facial es otro de los tratamientos más recurridos a la hora de acabar con las ojeras. Como en la mayoría de los casos, estamos hablando de tratamientos indoloros y que no precisan en absoluto de recuperación o de llevar unas medidas de protección complejas, estos se vuelven bastante famosos y cada vez más personas se animan a probarlos.
Con respecto al funcionamiento de la radiofrecuencia, tiene como principal objetivo el acabar con aquellas líneas de expresión y las arrugas faciales, por lo que podremos acabar con las ojeras de una forma rápida y sencilla.
Estamos ante un tratamiento que no cuenta con ningún efecto secundario, lo cual es bastante interesante y hace que se pueda probar sin el menor miedo ya que nada malo puede derivar del mismo. Las sesiones tienen una duración de unos 40 minutos de media y lo que se lleva a cabo es estimular la circulación sanguínea y la regeneración del colágeno. Para poder provocar esta estimulación de nuestro cuerpo, se lleva a cabo la aplicación de ondas electromagnéticas. Mediante el uso de esta ondas, lo que conseguimos es mejorar la elasticidad de la piel, por lo que acabamos con las temidas líneas de expresión, aportando una mayor firmeza a la zona tratada.
Los efectos se notan desde el primer día de la aplicación y además, cuenta con la ventaja de que también se previene la aparición de líneas futuras y retrasa también las arrugas, por lo que las ojeras, desaparecerán de nuestra vida durante un buen tiempo.
Las recomendaciones para después del tratamiento son bastante sencillas y una vez más, tendremos que tratar de exponernos al sol, sobre todo con la zona tratada y tomar suficiente agua para tener constantemente la piel hidratada. Además, se recomienda no utilizar ningún tipo de producto exfoliante y tener cuidado con los productos más ácidos ya que pueden causar alguna irritación en la piel.
Inyección de colágeno
Al fin y al cabo, los problemas causados por las ojeras suelen tener como resultado la aparición de más problemas en nuestro rostro. Los dos tratamientos anteriores son bastante eficaces y recomendados para tratar estas ojeras pero también otros problemas como las arrugas y las líneas de expresión. Sin embargo, ahora con la inyección de colágeno, vamos a hablar de un tratamiento mucho más específico y que va a la raíz del asunto, directamente a la ojera.
En este caso, este tratamiento consiste en inyectar un material que se pueda reabsorber, como por ejemplo es el colágeno o el conocido ácido hialurónico. Al igual que los tratamientos anteriores, el resultado es inmediato, por lo que saldremos de la clínica con la cara completamente mejorada.
Estamos ante un tratamiento que es indoloro, de hecho, se puede practicar hasta sin anestesia. Sin embargo si que es importante tener en cuenta que la zona que estamos tratando, se trata de una zona bastante delicada por lo que se puede aplicar una pequeña anestesia en forma de crema si somos bastante delicados al dolor. Es importante señalar también, que el ácido hialurónico suministrado es especial y cuenta con una pequeña dosis de anestesia en su interior por lo que difícilmente notaremos algo en su aplicación.
La duración del tratamiento no es para siempre, por lo que en este caso dependerá de varios factores. En primer lugar, evidentemente de la cantidad de producto suministrada. Sin embargo, no vamos a poder echar toda la cantidad que queramos si no que cada paciente, admitirá una cierta cantidad de dosis y es importante respetarla. Además de la cantidad, la calidad del producto también es otro factor a tener en cuenta. Por lo demás, señalar también que no se puede corregir constantemente y que tendríamos que esperar a que finalice el resultado del mismo para poder empezar a aplicar el tratamiento de nuevo. Para hacernos una idea, estaríamos hablando en total de realizar el tratamiento dos veces al año como mucho y con ello, tendríamos un resultado más que necesario.
Aquí tienes más información sobre el colágeno hidrolizado.
Blefaroplastia
Algunas veces no queda otro remedio que terminar con las bolsas que nos cuelgan en el párpado inferior. Las ojeras, además de aparecer por síntomas de cansancio, pueden ser directamente hereditarias por lo que en este sentido, pocas soluciones más allá de la blefaroplastia se nos presentan.
De esta forma, con esta intervención lo que haremos será corregir las bolsas que nos aparecen en los párpados inferiores, reposicionando todo le exceso de tejido sobrante además de reforzar a los músculos que se encuentran debajo del ojo.
En este sentido ya estamos hablando de una operación y para ello, se procederá a la extracción de toda la piel y grasa sobrante debajo del ojo.
Como hemos visto, existen muchos tratamientos en donde cada uno de los cuales puede ser recomendado para cada caso en concreto. Dependiendo del tipo de ojera que tengamos, las causas de la misma o la procedencia, podemos llevar a cabo un tipo de intervención determinado por lo que no existe una solución única para cada problema de ojeras, si no que tenemos que evaluar todas las opciones que tengamos y en la mayoría de los casos, las decisiones vienen determinadas según el tipo de paciente.
Tratamientos naturales con los que podemos reducir la aparición de las ojeras
Todos estos tratamientos tienen algo en común, acabar con las ojeras. Está claro que independientemente de como sean o de que forma se apliquen, el objetivo es el mismo, acabar con estas. Sin embargo, si prevenimos la aparición de dichas ojeras, no tendremos que llevar a cabo ningún tipo de tratamiento y realmente existen rutinas y remedios naturales que podemos poner a nuestra disposición en donde si no eliminamos por completo la posibilidad de que nos aparezcan, reduciremos de forma considerable la probabilidad de que ocurran.
En primer lugar, es importante beber mucha agua para tener la piel hidratada y que esta se encuentre libre de toxinas. Beber abundante agua es un consejo que nos van a dar todos los médicos ya que es importante para todos los órganos del cuerpo humano, riñón, hígado, corazón? en definitiva, estar hidratados nos permitirá evitar en buena medida esta aparición de ojeras.
Otro aspecto que es importante tener en cuenta, es disfrutar de una buena alimentación. Una alimentación variada y que sea rica en antioxidantes, en potasio y hierro, favorecerá la circulación sanguínea y favorecerá a que no se retengan líquidos y por lo tanto no se den inflamaciones. De esta forma, nos acordamos de lo que hablábamos al principio acerca de su color azul, en donde no era un capricho del destino este color si no que era síntoma de una mala circulación y es mediante estos alimentos, en donde queremos acabar con estos problemas.
Además de una buena alimentación, los buenos y los malos hábitos también tienen una gran importancia. De esta forma, hacer deporte es algo que nos vendrá francamente bien y que además nos ayudará a dormir, aspecto también bastante importante debido que para eliminar el cansancio y recuperarnos por completo, para afrontar con una mayor energía al día siguiente, es recomendable dormir de 7 a 8 horas. De esta forma, si estamos descansados, nos podemos ir olvidando de las ojeras como síntomas de cansancio. El tabaco y el alcohol por su parte, además de dañarnos el organismo, también tendrá importancia en nuestras ojeras por lo que si cambiamos estos hábitos por otros más saludables, estaremos mejorando de forma considerable nuestra mirada.
Por último, si vemos que los problemas de circulación son bastante evidentes y que pese a llevar a cabo todos estos consejos, siguen apareciendo estas ojeras, podemos hacernos un suave masaje con el objetivo de volver a reactivar el flujo sanguíneo de la misma. No obstante si esto no revierte, lo que estaremos haciendo es una solución temporal y no a largo plazo, por lo que ya estaremos experimentando síntomas cuya solución, pasa por alguno de los procesos anteriores.
En definitiva, las ojeras tienen tan fácil su aparición como su desaparición. Si quieres acabar con ellas no te preocupes porque cada vez los tratamientos son más avanzados y tienen mejores resultados. Sentirse y parecer mucho más joven, ahora es una posibilidad por lo que será mucho más sencillo sentirnos mejor con nosotros mismos y presumir de una mirada mucho más reluciente, libre de estas molestas ojeras.